El secretario general de la Intendencia de San José, Sebastián Ferrero, afirmó que si Rubén Bacigalupe resulta electo intendente, se harán cambios en la organización interna del gobierno departamental. En particular, señaló que se dejará sin efecto el trabajo de algunas personas de confianza que hoy cumplen funciones de gestión sin estar dentro del organigrama oficial.
Ferrero, dirigente del Partido Nacional y líder de la lista 33, sostuvo que esas figuras —ubicadas en distintos niveles jerárquicos— han formado “chacritas de poder” que funcionan por fuera de las estructuras formales. Según explicó, eso dificulta el funcionamiento de la Intendencia y genera problemas en el trato entre los funcionarios. Por eso, aseguró que un posible gobierno de Bacigalupe buscará ordenar los cargos y actuar con más transparencia.
Por otra parte, Ferrero dijo que se trabajará para mejorar las condiciones laborales de los funcionarios. Aclaró que no se piensa aumentar el presupuesto, pero sí cambiar la forma en que se pagan los salarios. La idea, dijo, es fortalecer el sueldo base para que los trabajadores puedan tomar vacaciones sin depender de ingresos variables como las horas extras.
El jerarca destacó la importancia de reconocer a quienes se comprometen con su tarea, más allá del cargo o la antigüedad, y que actúan como verdaderos servidores públicos. Además, pidió disculpas si alguna de sus recientes declaraciones fue malinterpretada, y subrayó que sus críticas fueron dirigidas solo a cargos de confianza que no están regulados por el organigrama formal.